Ciudad de México; 17 de diciembre de 2019.- Muchos de los mensajes que se envían a través de las redes sociales son tan veloces, que cuando reflexionamos sobre lo que queremos decir, ya lo dijimos; este medio es tan expedito que muchas veces no pasa por el plazo de asimilación que requiere la comunicación, afirmó Juan Villoro, colaborador de la Revista de la Universidad de México.
En la actualidad las formas de comunicación son tan vertiginosas que muchas veces la reflexión no anteceda al texto; la prontitud al enviar un mensaje cambia el contenido del mismo, dijo el escritor, académico y Premio Iberoamericano de Letras 2012.
“Cuando algo te indigna o irrita sientes la necesidad de reaccionar. La indignación exige una respuesta hacia afuera, una condena, decir ‘no estoy de acuerdo’, y es tan fácil picar un botón para sentir que ya ‘hice algo’. Pero esta forma de comunicación nos lleva a una serie de espejismo”.