Ciudad de México; 14 de abril de 2022.- La carne de conejo es una opción para incluirla en la alimentación diaria, señalan investigadores de la UNAM.
A pesar de tener grandes cualidades alimenticias, la carne de conejo es poco consumida en México, apenas 128 gramos per cápita. En cambio, el pollo supera 32 kilogramos por persona al año, de acuerdo con la Unión Nacional de Avicultores; en el caso de pescados y mariscos, es de 13.8 kilogramos anuales, según datos del Consejo Mexicano de Promoción de los Productos Pesqueros y Acuícolas.
En lo anterior coincidieron las académicas universitarias Eloisa Chino Rosario y Claudia Alcázar Montañez, de las Facultades de Estudios Superiores (FES) Cuautitlán y de Medicina Veterinaria y Zootecnia, respectivamente, quienes agregaron:
Por su valor nutricional a partir de proteínas, minerales y vitaminas, además de su bajo aporte calórico, es una excelente opción para incluirla en la alimentación diaria, en particular para quienes buscan reducir el colesterol o padecen arterosclerosis, gota o elevación en el ácido úrico, así como para aquellos que tienen régimen alimenticio para bajar de peso. Debido a sus reducidos aportes de sodio, es también conveniente para quienes sufren hipertensión o para los que tienen problemas renales.
Es menos popular que la de res o de cerdo; sin embargo, es una de las carnes blancas que puede ingerirse con frecuencia, incluso durante la cuaresma, al igual que el pollo, pavo y pescado, dijo Chino Rosario.
El conejo se cría y consume, en su mayoría, en la zona centro del país debido al clima templado que prevalece y contribuye a su desarrollo, como Puebla, Estado de México –principal productor, con un rendimiento aproximado de dos mil 340 toneladas de carne–, Ciudad de México, Hidalgo y Tlaxcala, aunque también se produce en Oaxaca y Chihuahua, por ejemplo.