México, D.F.- Por diversas razones, y ahora por el impacto del huracán Harvey en Texas, es probable que no sólo se incrementen los precios de las gasolinas, sino que éstos tengan un impacto en el nivel de inflación en nuestro país. Además, con la presencia de dos meteoros más en el Océano Atlántico se podría esperar desabasto de combustibles y mayor incertidumbre.
Ante ese panorama, es tiempo de una discusión serena e informada para emprender la sustitución gradual del consumo de hidrocarburos por otras fuentes de energía. Lo que se debe hacer es atacar el problema reduciendo la demanda de combustibles fósiles. Ésa es la solución que debemos impulsar, afirmaron académicos de la UNAM en rueda de medios.
Daniel Alejandro Pacheco, de la Facultad de Economía (FE), sostuvo que los huracanes que nos afectan en la actualidad pueden ser una llamada de atención para pensar en la transición del sector energético.
Hoy se registra una inflación de 6.66 por ciento, cifra que no se veía desde 2008, y que podría aumentar. El proceso inflacionario comenzó en enero, a partir del gasolinazo, fecha que marcó un incremento en los precios del petróleo.
En EU el aumento en el costo de las gasolinas a finales de agosto y comienzo de septiembre ha sido de 17 por ciento; se ha estimado que en México es probable que aumente en siete por ciento, con un precio máximo de 16.97 para la gasolina Magna, 18.97 para la Premium y 17.60 para el diésel, expuso el experto.