México, 24 Mar (Notimex).- De acuerdo a una investigación del Instituto Nacional de Cancerología (INCan), 20 por ciento de los pacientes con cáncer de colon o recto son menores de 40 años, lo que demuestra que la enfermedad se presenta cada vez en personas más jóvenes.
La Organización Mundial de la Salud (OMS) estima que para el 2030 habrá un incremento de 60 por ciento en los casos de ese tipo de cáncer en América Latina.
Entre los factores de riesgo están estilo de vida, obesidad, bajo consumo de frutas y verduras, y sedentarismo, precisó Erika Betzabé Ruiz García, oncóloga adscrita al Departamento de Tumores Gastro-Intestinales del Laboratorio de Medicina Traslacional del INCan.
El cáncer colorrectal se origina en el intestino grueso en el colon o en el recto (rectal) y es cada vez más frecuente en México; las probabilidades de padecerlo en algún momento de la vida, es en términos generales muy alto, señaló la especialista encargada de la investigación.
“Se trata de una enfermedad estigmatizada, considerada como sucia y del que casi nadie quiere hablar cuando se presentan los síntomas tempranamente como son los sangrados, los cuales suelen confundirse con hemorroides; a las personas les da pena hablarlo y postergan sus revisiones, lo que hace que los diagnósticos se realicen tardíamente”, agregó.
Además de los sangrados se presentan otros síntomas como alteraciones en los hábitos intestinales, con alternancia entre períodos de diarreas y estreñimiento, y entre más avanzado este el cáncer hay pérdida de peso y fatiga.
Erika Betzabé Ruiz, también presidente de la Sociedad de la Sociedad Médica del INCan, dijo que el tamizaje en cáncer colorrectal se recomienda a parir de los 50 años, pero si una persona tiene antecedentes familiares tendrá que hacerse la prueba 10 años antes de cuando ellos fueron diagnosticados con cáncer.
Una de las opciones más simples es hacer FIT, una prueba que busca sangre oculta en materia fecal y de salir positiva deberá hacerse una colonoscopia para descartar tumores dentro del colon.
Actualmente el InCan realiza una campaña de detección oportuna de este tipo de cáncer mediante la prueba FIT, misma que se puede solicitar en el Servicio de Endoscopia de esta institución.